zona. Merece la pena visitar su casco antiguo y pasear o hacer deporte en el Parque Olímpico del Segre, que acogió competiciones de piragüismo en las olimpiadas de Barcelona 92.
En los alrededores puede disfrutarse de la mejor oferta de estaciones de esquí nórdico del lado sur del Pirineo y de magníficos bosques de pinos y abetos.
En los alrededores puede visitarse la iglesia de la antigua abadía benedictina de Sant Serni de Tavèrnoles, consagrada en el 1.040. Su frontal del altar se encuentra en el MNAC de
Barcelona y parte de sus capiteles en Estados Unidos.
Muy próximo a La Seu d´Urgell se encuentra el Principado de Andorra, que merece una visita, tanto por sus grandes áreas comerciales como por sus bellezas naturales y artísticas. Tiene también Andorra excelentes pistas de esquí y múltiples posibilidades para los amantes de los deportes de montaña.
Siguiendo el curso del Segre hacia el sur, la localidad de Organyà posee una iglesia del siglo XII, Santa María, de tres naves, campanario de planta cuadrada y notable portada. En esta localidad se encontraron las famosas Homilías, el texto literario más antiguo conocido en lengua catalana, que datan de los siglos XII y XIII. Se trata de seis sermones con comentarios de diferentes evangelios y epístolas que se conservan hoy en la Biblioteca de
Cataluña.
Un poco más al sur, encontramos en Coll de Nargó la antigua iglesia románica de Sant Climent con un excepcional campanario adosado con ventanales en arco de herradura. En este mismo municipio, Sant Romà de Valldarques es una bonita iglesia del siglo XII con campanario de torre con decoración lombarda.
La Cerdaña es un amplio valle de orientación este-oeste situado entre la cordillera pirenaica y las sierras del Cadí y Moixeró. Su situación estratégica la hizo objeto de numerosas disputas entre Francia y España, hasta que en el Tratado de los Pirineos (1659) se partió la comarca natural entre ambos países. La división provincial española volvió a dividirla administrativamente entre las provincias de Lérida y Girona. Este valle es actualmente un importante centro turístico, gracias a sus hermosos paisajes y un buen equipamiento para los deportes de montaña y esquí. La capital, Puigcerdà, situada sobre una colina, fue fundada en el año 1.177 por el rey Alfonso II de Aragón, y es el principal núcleo urbano y comercial de la comarca.
La Cerdaña posee interesantes monumentos de diversas épocas y estilos. Habitada desde el neolítico ha sido siempre una tierra de paso y en época medieval, después de la consolidación del condado, alcanzó el momento artístico más brillante de su historia. Hermosos ejemplos de arte románico pueden verse en iglesias como la de Talló o Santa Eugenia de Nerellà y las murallas de Bellver que son un ejemplo de arquitectura militar del siglo XIII. El gótico está bien representado en las iglesias de Bellver y Puigcerdà (Sant Domènec y Santa María). En Llívia, enclave en territorio francés, se encuentra una curiosa farmacia medieval, probablemente la más antigua de Europa.
